álbum
ORIGO
Pablo Suárez, Piano
Pablo Martín Contrabajo
Shayan Fathi, Batería
Grabado en Camaleón Studio, Madrid
Ingeniero de sonido, Shayan Fathi
Fotos / Videos, Noah Shaye
Cuadros flamencos, Adela García
Discográfica, Karonte
ORIGO
Después de la mitad de mi vida dedicado prácticamente a tiempo completo a la música, tengo la necesidad y me atrevería a decir que tengo la obligación de dejar mis conocimientos, lo que he aprendido, lo que he vivido y me ha tocado vivir, mi experiencia que creo enormemente que es lo más valioso de cualquier persona porque eso es lo que somos, y pensando en la brevedad de la vida, lo único que realmente puedo aportar y puede perdurar es mi música.
Escucha
La elección del formato trío es arriesgada puesto que no existe ningún elemento tradicional flamenco, está más dentro de un contexto jazzístico puesto que mi inquietud, mi libertad, mi estudio y mi instrumento está muy vinculado a esas formas, y mi trabajo, considero que ha sido precisamente sonar flamenco dentro de ese contexto donde utilizo sin limitaciones ni imitaciones las posibilidades del instrumento unida a mis conocimientos.
EL PIANISTA DE LA LUZ
Su música siempre me ha parecido una metáfora de la luz: unas veces con la blancura del mediodía; otras con los anaranjados del atardecer; en ocasiones fundiéndose con la niebla…
No sé si su música es la que desprende esa luz o es su luz la que crea esa música. Posiblemente una cosa lleve a la otra. El caso es que sus notas aparecen como destellos que van creando una atmósfera aparentemente frágil, pero de una consistencia categórica. Ahora Pablo Suárez se presenta por vez primera en solitario y lo hace sorprendiendo con una propuesta en la que, sobre estructuras flamencas, construye un discurso nuevo en su biografía musical, desarrollando melodías que cobran vida propia, que se escapan, que vuelven, que se entrelazan y a las que va arropando con armonías inesperadas que desafían la fuerza de la gravedad.
Este color jazzístico y radicalmente contemporáneo tiene su origen en los atávicos sones familiares que cierran el álbum. Un trabajo valiente, honesto y sincero que propone una transferencia emocional de altísima fidelidad entre su corazón y el nuestro. Sin filtros. Esa es la pureza de Pablo Suárez. Encended vuestra escucha, subid a tope vuestra capacidad sensitiva, dejad que sus notas iluminen vuestro interior y disfrutad de la belleza que, como decía el maestro Ramón Trecet, es lo único que merece la pena en este asqueroso mundo.
Hágase la luz.
Manuel Moraga